LA PIEDRA

Ubicada a 70 kilómetros de Medellín y con una gran escalera interna que cuenta con 740 escalones, la Piedra del Peñol es el sitio más visitado por los antioqueños. Ofrece a turistas una hermosa vista sobre la represa de Guatapé, sitio ideal para los amantes de la práctica de deportes náuticos. La represa, creada por las Empresas Públicas de Medellín, inundó parte del municipio, además de algunas veredas aledañas, obligando a sus habitantes a cambiar la base de su economía, la agricultura, por una nueva, la pesca.
 

Según los geólogos. La piedra tiene aproximadamente 65 millones de años y con esto, miles de historias que contar acerca de ella. En la época indígena fue una Deidad, como lo atestiguan las evidencias arqueológicas encontradas a su alrededor.
También fue en otros tiempos un estorbo para la agricultura; antes de que la piedra fuera un centro turístico, era un lugar en el que se cultivaba y como la piedra daba mucha sombra, este no era el sitio más fértil ya que los cultivos se demoraban en crecer y es por esto que no fue útil para su antiguo dueño.

PRIMERA: Se dice que pudo haber sido un meteorito, hasta que un grupo de geólogos hicieron los estudios acerca de sus componentes y descartaron esta teoría, ya que estos los da la misma tierra, los cuales son granito, cuarzo y feldespato.

SEGUNDA: Se dice que fue una erupción volcánica y al hacer contacto con el aire se hizo roca.

TERCERA: Es quizá la más acertada, por cuanto en el Oriente Antioqueño, estamos sobre una placa tectónica llamada “batolito antioqueño” que comprende un área aproximada de 10.000 kms2 entre los municipios que abarca están: San Vicente Ferrer, El Peñol, Guatapé y San Carlos, es por esto que dicha teoría, cuenta que fue por un choque de placas tectónicas, lo cual originó un afloramiento de piedras, la más representativa el Peñol de Guatapé, como una de las más grandes del mundo y la única con escalas.

También están: El Peñonicito, ubicado en el municipio de San Vicente Ferrer con una altura máxima de 50 metros, La Piedra del Marial, ubicada en la vereda El Marial del Municipio de El Peñol y La Piedra del Tabor, ubicada en el Municipio de San Carlos.

Este monolito es una de las maravillas del mundo, creada por Dios y embellecida por la mano del hombre.

El Peñón de Guatapé o Piedra del Peñol, fue escalado por primera vez el 16 de julio de 1954, por los señores Luis Eduardo Villegas López, Pedro Nel Ramírez y Ramón Díaz; esto lo hicieron bajo el auspicio del Presbítero Alfonso Montoya Velásquez.

En esta época la gente catalogó a estos hombres como suicidas, ya que escalaron la piedra con cuerdas y guaduas, las cuales utilizaron para hacer más fácil el camino, una forma muy rudimentaria e insegura. Fue entonces que después de cinco días de lucha incansable, estos valientes alpinistas, lograron llegar a la cima e izaron el Pabellón Nacional y en ese momento se dividió la historia de la Piedra en dos partes: antes y después.

ANTES: La Piedra fue considerada un estorbo para quienes eran los dueños; en aquellos tiempos se vivía exclusivamente de la agricultura y este peñón daba una gran sombra a los terrenos aledaños, lo que hacía que esa tierra no fuera productiva para cultivos.

DESPUÉS: En el momento que fue escalada la piedra cambió la historia, pues la noticia fue regada por toda la región, lo que ocasionó curiosidad a la mayoría de periodistas y antioqueños inicialmente; en esta época, el acontecimiento fue publicado en los periódicos y todo esto atrajo a visitantes, periodistas y extranjeros.

Hoy, este monolito es considerado uno de los principales atractivos turísticos de la región y del mundo, ya que el solo hecho de mirarlo, ocasiona la curiosidad de treparlo y divisar desde allí el mejor de los paisajes, rodeado del embalse Peñol – Guatapé, considerado el segundo más grande en extensión en Sur América, el cual fue construido por Empresas Públicas de Medellín, proyecto terminado en el año 1978, cuyo objetivo es el almacenamiento de agua, para la generación de energía y también ha sido un atractivo más para los visitantes y turistas que disfrutan de una buena pesca y de los diferentes deportes acuáticos que allí se practican.

En el año 1955 comenzó la construcción de las escalas en madera, asunto que fue presentando obstáculos; los cuales no interrumpieron los planes de hacer de este monolito uno de los centros más importantes de la región; en el año 1957 se logró terminar los 432 peldaños que inicialmente tuvo la Piedra, se dice que las primeras personas que subieron fueron extranjeros.

Con el tiempo se vio la necesidad de escalones en concreto, su construcción se inició en el año 1965 y se terminó en el año 1971; sumaban 740 escalones por los cuales, miles de visitantes han tenido la valentía de subir; como también es claro, que muchas personas con solo ver la altura, no se arriesgan.

Actualmente, hay unas escaleras para ascender y otras para descender, su fin es brindar a las personas la seguridad y comodidad.

En el año 1988 se iniciaron las letras que hoy se ven en la parte posterior de la Piedra, fueron escritas mediante un convenio que celebraron el Señor Luis Villegas y el Alcalde de esa época Doctor Jaime Alfonso Giraldo Mejía; fue en ese momento, cuando don Luis le dio la palabra al Señor Alcalde, de escribir Guatapé en la Piedra. La elaboración de esas letras tardó aproximadamente dos meses, fueron hechas por Don Luis Villegas y Don Antonio Quintero, están escritas con pintura de base de caucho, tienen una vida útil de 30 años aproximadamente y cada una mide 30 mts de alto por 15 mts de ancho.

En el año 1944 fue fundado El Peñol y dentro de su jurisdicción estaba la Piedra y Guatapé, por eso, la costumbre de que la piedra se llamada “Piedra del Peñol”; Guatapé se independizó como Municipio y dejó de ser corregimiento de El Peñol y desde entonces, la Piedra quedó en terrenos de éste.

Es válido explicar que tanto para Guatapé como para El Peñol, la Piedra es identidad cultural y fue por eso que el Municipio de El Peñol argumentó que por medio de la Ley 23 de 1973, se prohíbe que los atractivos turísticos naturales sean tachados o pintados, con lo cual logró que no se llevara a cabo el convenio que había acordado Don Luis con el Municipio de Guatapé; desde entonces existen las letras GI, con las cuales se iba a escribir: GUATAPÉ.

*Textos tomados del libro: “Piedra del Peñol o Peñón de Guatapé y su Historia”
Autora: Leidy Julieth Giraldo Hincapié
Guía de Turismo Certificada por el SENA

Siempre ha sido una inquietud conocer sobre la historia que abarca esta hermosa mole en el Municipio de Guatapé.

El señor Luis Eduardo Villegas López, desde muy niño tuvo la curiosidad del por qué de la piedra y de que hoy está aquí. Un día con dos amigos más, Pedro Nel Ramírez y Ramón Díaz bajo el auspicio del Padre Alfonso Montoya Velásquez decidieron escalar esta gran mole, en esa época fue una hazaña y desde ese día la historia de la Piedra cambió, para convertirse en uno de los principales sitios turísticos de la región.

¿Cómo se llamaba la Piedra?
¿Cuál es su verdadero nombre?

Siempre que se escucha hablar de la Piedra se escuchan varios nombres: unos dicen “La Piedra del Peñol”, otros dicen “Peñón de Guatapé” y es por eso que los lugareños escuchan y corrigen el nombre de la piedra porque ellos quieren que la llamemos por su verdadero nombre. Para saber el verdadero nombre, es necesario saber porque nace esta confusión, cuál fue la razón porque hoy en día no tenemos claro el término “peñol” o “peñón”.

Hace muchos años los pueblos de El Peñol y Guatapé fueron un solo territorio, posteriormente Guatapé se separó de El Peñol y había una polémica de quién era la Piedra, el pueblo de El Peñol decía: “es mía…! y Guatapé decía: “no, la piedra es mía…” y era así una continua discusión, finalmente, mediante un decreto, dicen la Piedra pertenece a la jurisdicción del pueblo de Guatapé.

Se acaba esta polémica pero no se acaba la del nombre debido a que muchos antioqueños pensamos: “Piedra del Peñol” porque está cerca del pueblo de El Peñol, pero realmente el nombre de la piedra es “Peñón de Guatapé” ya que la palabra “Peñón” no viene del nombre del pueblo sino de la palabra “peña” que es igual a piedra o roca. *Textos tomados del libro: “Piedra del Peñol o Peñón de Guatapé y su Historia”

Autora: Leidy Julieth Giraldo Hincapié
Guía de Turismo Certificada por el SENA

Existen varios mitos y leyendas acerca de la Piedra del Peñol o Peñón de Guatapé, entre los cuales se encuentran: “El Hacha del Diablo”. “La Gallina de los Huevos de Oro”, “El Aeropuerto de las Brujas” y “El Duende”.

EL HACHA DEL DIABLO
Cuentan que el Diablo nunca estuvo de acuerdo con que la piedra fuera visitada por tantas personas y quiso tumbarla con un hacha y llevársela para otra parte, todas las noches iba a trabajar para cumplir su funesto deseo, pero él nunca supo que en el día, Dios se encargaba de borrar el trabajo que realizaba y es por esto que aún está La Piedra en su lugar.

La Gallina de los Huevos de Oro
Como siempre se ha sabido, en Semana Santa es el tiempo para buscar entierros, pero, como todo tiene su misterio y se dice que “La Gallina de los Huevos de Oro” sólo se puede sacar el Viernes Santo a las doce de la noche, allí se tiene un minuto y si en ese tiempo no lo logra, la gallina lo convierte en un huevo de oro más.

El Aeropuerto de las Brujas
Cuentan los abuelos de la localidad que todos los días después de las 9 de la noche, se ven llegar a las brujas a la cima de la Piedra, ella se reúnen allí y salen a sobrevolar toda la zona, cuando están en el aire, se ven destellos de luz que salen de sus escobas, sus carcajadas son extravagantes y es por esto que al sitio se le ha llamado “El Aeropuerto de las Brujas”.

El Duende
Cuentan algunas personas de la comunidad, que un día como a eso de las 5:30 de la tarde llegó un señor bajito, con un sombrero, pantalón roto y camisa, para subir a la Piedra, pero al señor no le alcanzaba la plata para pagar el ingreso, se puso a llorar para que lo dejaran pasar y las personas encargadas lo dejaron subir, con la condición de que bajara con los trabajadores de la cima; al bajar los trabajadores, les preguntaron por el viejito y ellos dijeron que allá no había llegado nadie, les pareció extraño: a las ocho de la noche, subían por el sector de la curva (vía hacia la Piedra) dos muchachos y sintieron que cayó algo desde arriba, fue tal el susto, que salieron corriendo por distintos caminos y contaron a otras personas, quienes por curiosidad se fueron a mirar y volvió a caer algo desde allá, al igual que los demás, corrieron y se encerraron en sus casas, al otro día contaron que habían visto al duende caminando por todas partes, sin camisa y sin zapatos… y desde entonces, se dice que El Duende anda buscando el oro que hay en la Piedra.

*Textos tomados del libro: “Piedra del Peñol o Peñón de Guatapé y su Historia”
Autora: Leidy Julieth Giraldo Hincapié
Guía de Turismo Certificada por el SENA